6 de abril de 2020
3 de abril de 2020
2 de abril de 2020
Reseña de Brujas: ¿estigma o la fuerza invencible de las mujeres, de Mona Chollet
Nota: la reseña de este libro parte de la lectura del original en francés, Sorcières: la puissance invaicue des femmes (La Découverte, 2018).
Hace un tiempo (junio de 2018) contemplé una pintada en una de las paredes de la 3ª planta de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Barcelona. Una de esas frases que se hacen ubicuas y que podemos encontrar en cualquier parte, incluso en camisetas.* La frase, cuyo origen desconozco, suele repetirse a menudo en el discurso feminista y se erige en un mantra que, no por mucho repetirse, deja de perder significado. La asociación de la bruja con la mujer que ha sufrido (y sufre) represión a lo largo de la historia es más que evidente: remite, así, a la persecución de las mujeres que no siguen un comportamiento ortodoxo” con la sociedad, un lugar que se reserva al hogar y el cuidado de la familia. La caza de brujas de los siglos XVI y XVII –con el caso famoso de Salem, en Massachussetts, en 1692, recreado por Arthur Miller en su obra de teatro The Crucible (Las brujas de Salem)– pasó, en el argot popular, a significar la persecución de los disidentes (los comunistas en los Estados Unidos de la década de 1950, por ejemplo) y de aquellos grupos sociales considerados “peligrosos”. A finales de la década de 1960 la bruja fue recuperada como símbolo de un feminismo que se rebelaba contra el heteropatriarcado, en particular por los grupos feministas que confluyeron en W.I.T.C.H. (siglas en inglés de Women's International Terrorist Conspiracy from Hell), organización en la que el activismo político se mezclaba con un cierto credo neopagano en relación con la brujería, y que tuvo un cierto éxito. Sea como fuere, la asociación de la bruja con una mujer (más o menos) “liberada” de las normas sociales “convencionales” (sea eso lo que quiera ser, desde luego), ha permanecido.
1 de abril de 2020
31 de marzo de 2020
30 de marzo de 2020
27 de marzo de 2020
26 de marzo de 2020
Reseña de The Habsburg Empire: A Very Short introduction, de Martyn Rady
En el párrafo final de su libro, Matyn Rady relata una anécdota muy definitoria:
«En una ocasión, el conde húngaro Kállay digirió la atención del emperador a la antigüedad de la familia Kállay, que, como explicó con orgullo, había producido grandes señores cuando los antepasados de Francisco José eran sólo pequeños barones en Suiza. “Sí, pero nosotros lo hemos bastante mejor”, respondió el emperador. Allí donde estuvo el Imperio de los Habsburgo la Europa Central ahora hay trece repúblicas, muchas de ellas gobernadas por matones y ladrones que han saqueado a sus poblaciones. Los Habsburgo, en efecto, lo hicieron bastante mejor» (traducción propia).
La imagen que tenemos del entramado imperial de los Habsburgo –Imperio austriaco a partir de 1806, Imperio Austrohúngaro desde 1867– suele ceñirse a la de un decadente y mastodóntico viejo imperio, anclado en un pasado absurdo y desfasado, como en cierto modo parodió Anthony Hope con el ficticio país de Ruritania en la novela El prisionero de Zenda (1894), adaptada al cine en dos ocasiones (la más conocida, la de 1952, protagonizada por Stewart Granger y Deborah Kerr).
25 de marzo de 2020
24 de marzo de 2020
23 de marzo de 2020
Reseña de América: The Epic Story of Spanish North America, 1493-1898, de Robert Goodwin
Termina Robert Goodwin su libro parafraseando a Miguel Moya Ojanguren, director del periódico El Liberal, quien a finales de noviembre de 1898 escribió un artículo titulado “Día Nefasto” y en el que se decía:
Hoy se firmará en París el Tratado por el cual renuncia España á la posesión de Cuba, de Puerto Rico y de Filipinas. Hoy se cerrará, para siempre la leyenda da oro, abierta por Cristóbal Colón en 1492, y por Fernando de Magallanes en 1621. […] Al cabo de cuatrocientos años, volvemos de las Indias Occidentales, por nosotros descubiertas y del extremo Oriente por nosotros civilizado, como inquilinos a quienes se desahucia, como intrusos á quienes se echa, como pródigos á quienes se incapacita, como perturbadores á quienes se recluye. (El Debate, 28 de noviembre de 1898. Disponible en la hemeroteca digital de la Biblioteca Nacional).
La cita es elocuente sobre un estado de ánimo y contextualiza muy bien el sentimiento de quienes consideraban que, a finales de ese año 1898, se cerraba la etapa imperial iniciada cuatro siglos antes con el desembarco de Colón en la isla de San Salvador.
21 de marzo de 2020
Reseña de Dangerous Mystic. Meister Eckhart’s Path to the God Within, de Joel F. Harrington
He de reconocer que cuando empecé a leer este libro no sabía quién era el Maestro (“Meister” en alemán) Eckhart de Hochheim (c. 1260-1328), pero sí conozco el período –las décadas finales del siglo XIII y las primeras del XIV– en el que vivió y el contexto (político, social, religioso) que le rodeó y con el que, a menudo, tuvo que lidiar. Y la conexión de la vida y obra de este personaje con el contexto en el que se ubicó hace especialmente interesante a un libro algo denso en cuanto a la glosa de la filosofía cristiana de Eckhart, pero muy sugerente en cuanto al clima religioso (y de fondo político) del período. Y es un período muy interesante, que ya tratara, al menos para la segunda mitad del siglo XIII, Steven Runciman en su clásica obra Las vísperas sicilianas (1958), recuperada por Reino de Redonda en 2009 (primera edición en castellano: Alianza Editorial, 1979): las disputas entre Imperio – Federico II Hohenstaufen y sus sucesores, especialmente Manfredo en Sicilia, y el Papado–, el Interregno imperial (hasta la elección de Rodolfo I de Habsburgo en 1273), las largas consecuencias del Concilio de Letrán IV impulsado por Inocencio III a principios de ese siglo (fundación de las órdenes mendicantes de dominicos y franciscanos, persecuciones de los cátaros, en primer lugar, y después de otros movimientos apostólicos considerados herejes), el rol de las beguinas y de movimientos como los Hermanos del Espíritu Libre (“Free Spirit” en el libro), que se mantendrían hasta el siglo XVI; el juicio y persecución de los templarios por parte de Felipe IV de Francia a principios del siglo XIV (y sus pugnas con el papa Bonifacio VIII), el traslado del Papado a Aviñón (la “cautividad babilónica del Papado”, como Dante y otros otras la definirían) y el cisma de la Iglesia durante la mayor parte de esta centuria (y que llegaría a su clímax con la existencia de tres papas en las primeras décadas del siglo XV). Y todo esto antes de la extensión de la Peste Negra, en 1346-1350, que Eckhart no llegó a conocer.
20 de marzo de 2020
19 de marzo de 2020
18 de marzo de 2020
17 de marzo de 2020
16 de marzo de 2020
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