A Martin Scorsese siempre le han preocupado la fe
religiosa y sus múltiples manifestaciones. Antiguo seminarista que iba
para sacerdote pero abandonó el camino (¿perdió la fe o quizá la manera
de entenderla?), en su filmografía (y más allá de La última tentación de
Cristo) subyace un interés por los aspectos más diversos de la religión
y la propia vivencia religiosa. Quizá por ello le interesara, hace
treinta años, una novela de Shusaku Endo, novelista japonés católico. El
argumento de la novela traza las andanzas de dos misioneros jesuitas,
Sebastião Rodrigues y Francisco Garrope, que viajan al Japón de 1640
para encontrar al padre Cristóval Ferreira, de quien cartas llegadas a
Occidente dejan caer el rumor de que ha apostatado en el seno de una
persecución de los cristianos japoneses (kirishitan)
por parte de las autoridades del período. Las azarosas calamidades de
los dos jóvenes jesuitas son relatadas a modo de diario por Rodrigues,
que se verá impelido a replantearse (a la fuerza) muchas de sus
creencias personales sobre la fe, la evangelización y la verdad. La
novela de Endo, que ya tuvo una primera versión cinematográfica japonesa
hace más de cuatro décadas, ha sido finalmente realizada por Scorsese,
que no sólo asume la dirección sino también la coautoría del guion
adaptado. Y el resultado es Silencio,
una película densa en contenido, con un exceso de metraje, un tempo
narrativo pausado… y las señas de identidad de un tipo tan personalísimo
como es Martin Scorsese.
17 de enero de 2017
16 de enero de 2017
Crítica de cine: La La Land, de Damien Chazelle
Damien Chazelle ha conseguido a los 31 años tocar
lo más alto en Hollywood (veremos si se confirma en los Oscars de este
año)…y quizá una película como La La Land (sin dudarlo me quedo con el título original y no con el demasiado explícito e innecesario La ciudad de las estrellas con
el que se ha estrenado en España) no sea más que una particular
captatio benevolentiae. Una película sobre Hollywood para Hollywood y
hablando de las cosas que les interesa/gusta/viven la gente de
Hollywood. Pero, quizá, también sea la carta de amor mejor elaborada en
los últimos años sobre los sueños, la esperanza, y la necesidad de no
rendirnos ante la desazón (y son tiempos complicados los actuales… y los
que vienen). Una historia sobre esa Ciudad de las Estrellas, sobre los
mitos actuales que la sustentan, sobre el Arte (a grandes rasgos, y si
no nos ponemos demasiado cínicos respecto a si el cine que se hace
actualmente en Hollywood es arte con mayúsculas). Sí, es cierto, hay un
cierto ombliguismo en la historia que cuenta Chazelle, pero también un
optimismo (teñido de bastantes dosis de realismo) en que el mundo
(hollywoodiense o del artisteo) tiene futuro, como tiene presente y,
desde luego, tiene pasado. De aquellos polvos, estos lodos; de aquel
género musical de los años dorados del cine, las décadas de los años
cuarenta y cincuenta, este musical de una era menos ingenua y desde
luego más reacia a aceptar que en una película la gente se ponga a
cantar o bailar porque sí. Pero esa es la esencia del musical y, con La
La Land, Chazelle la insufla de nueva vida.
13 de enero de 2017
12 de enero de 2017
11 de enero de 2017
10 de enero de 2017
9 de enero de 2017
6 de enero de 2017
5 de enero de 2017
Canciones para el nuevo día (2119/1348): "They Can't Take That Away From Me"
Love's Labour's Lost Cast - They Can't Take That Away From Me
4 de enero de 2017
Canciones para el nuevo día (2118/1347): "Good Morning"
Debbie Reynolds, Gene Kelly y Donald O'Connor - Good Morning
3 de enero de 2017
2 de enero de 2017
31 de diciembre de 2016
2016 (y III): un año de libros
30 de diciembre de 2016
2016 (II): un año de series de TV
A diferencia del cine, 2016 ha sido un espléndido año para las series de TV, con estrenos diversos, continuaciones y también finales o cancelaciones. Por mi parte han sido casi 80 series, entre las de temporada anual, corta y miniseries, las que he podido ver (y disfrutar) en este 2016 al que apenas le queda un día para decirnos adiós. Lo empecé, serialmente hablando, justo después de las campanadas de Año Nuevo con la miniserie And Then There Were None (BBC) y muy probablemente lo acabe con otra miniserie que adapta una novela de Agatha Christie: The Witness for the Prosecution (también de la BBC). Debo decir, antes de hacer balance y escoger las 15 series del año, que por supuesto la mía será una selección parcial, obligada incluso: es prácticamente imposible verlo todo (lógicamente...) y entre lo que a uno le interesa (y lo que no), lo que descarta y lo que (aún) no ha podido ver queda una selección subjetiva y siempre incompleta. Así, por ejemplo, llevo dos temporadas de retraso de The Americans (que se juntarán con la que llegue en 2017), aún no le he hincado el diente a American Crime y se quedan en "tareas pendientes" la 4ª y última de Rectify (Sundance Channel), la 3ª de Black Mirror (Amazon), The Fall (BBC) y Halt and Catch Fire (AMC), Westworld, Gomorra, Ennemi Public, BrainDead, Roadies, Quarry, The Get Down, 11/22/63, Designated Survivor, Marvel's Luke Cage, Pure Genius, Bull, Animal Kingdom, Travelers, Dirk Gently's Holistic Detective Agency, Goliath, Mars, StartUp, Chance... y otras tantas series que les tengo echado el ojo. Luego ha habido las series que he abandonado: Girls, por ejemplo, que ya me panté en su 5ª temporada, hace tiempo con The Walking Dead, y Atlanta, Divorce, Preacher, Outcast y alguna más tras su primer episodio (o que considere que "no son para mí"). Que quizá sea pronto, pero el día tiene 24 horas únicamente y, como dice Salvador Martí, "el tiempo es el que es". El regreso de The X-Files (FOX) me dejó frío... como lo hizo hace veinte años.
29 de diciembre de 2016
2016 (I): un año de cine
Como ya es "tradicional" por estas fechas, llega el repaso anual, aquello que me ha parecido más relevante de (entre lo que he visto en) 2016. Como suele ser habitual, algunas de estas películas en puridad son de 2015 pero, ya se sabe, se estrenan en las salas españolas semanas o meses después. En comparación con el año anterior, en este 2016 he podido ir más veces al cine (ayuda el pase de prensa) y por tanto al final han sido 50 las ocasiones en que me he sentado en una butaca. No ha habido repeticiones, como en alguna otra ocasión en años precedentes. Y como también suele pasar, algunas películas se quedaron en cartelera sin poder ver, pues a todo no llega uno: Elle de Paul Verhoeven o La muerte de Luis XIV de Albert Serra, por ejemplo, que ojalá repesque más adelante en alguna sesión filmotequera. También, como suele pasar, mucho de lo mejor se ha concentrado en los primeros dos meses, con las películas nominadas a los Oscars, y luego la cosa ha funcionado con altibajos. Si acaso, una de las primeras conclusiones a las que puedo llegar es que, a grandes rasgos, ha sido un año irregular respecto al cine que llegue allende el charco, refiriéndome en concreto a su cuadrante norte, mientras que ha sido el cine español, y el thriller en particular, el que ha generado excelentes películas en el otoño. Para variar, ha habido mucha marvelada, dececomicada y blockbusters varios, de los que a menudo he huido, a menos que fuera al pase de prensa. Y han sido grandes producciones adocenadas, en general, con alguna excepción que, en el caso de Deadpool, puede leerse como bofetada a las grandes sagas de vengadores, justicieros y demás: si un personaje gamberro y procaz, aunque también proceda del cómic, les ha dado pal pelo a las sagas y franquicias, es que la cosa ya empieza a ser "jartible". Tampoco me pondré a pontificar, pues alguna marvelada aún no he visto (Doctor Strange), Batman v. Superman: El Amanecer de la Justicia gana mucho en su versión extendida y Star Trek: Más allá me la miro con demasiados buenos ojos (no está tan mal como se proclamaba).
Canciones para el nuevo día (2114/1343): "Lose Yourself to Dance"
Daft Punk (ft. Pharrell Williams & Nile Rodgers) - Lose Yourself to Dance
28 de diciembre de 2016
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