A diferencia del cine, 2016 ha sido un espléndido año para las series de TV, con estrenos diversos, continuaciones y también finales o cancelaciones. Por mi parte han sido casi 80 series, entre las de temporada anual, corta y miniseries, las que he podido ver (y disfrutar) en este 2016 al que apenas le queda un día para decirnos adiós. Lo empecé, serialmente hablando, justo después de las campanadas de Año Nuevo con la miniserie And Then There Were None (BBC) y muy probablemente lo acabe con otra miniserie que adapta una novela de Agatha Christie: The Witness for the Prosecution (también de la BBC). Debo decir, antes de hacer balance y escoger las 15 series del año, que por supuesto la mía será una selección parcial, obligada incluso: es prácticamente imposible verlo todo (lógicamente...) y entre lo que a uno le interesa (y lo que no), lo que descarta y lo que (aún) no ha podido ver queda una selección subjetiva y siempre incompleta. Así, por ejemplo, llevo dos temporadas de retraso de The Americans (que se juntarán con la que llegue en 2017), aún no le he hincado el diente a American Crime y se quedan en "tareas pendientes" la 4ª y última de Rectify (Sundance Channel), la 3ª de Black Mirror (Amazon), The Fall (BBC) y Halt and Catch Fire (AMC), Westworld, Gomorra, Ennemi Public, BrainDead, Roadies, Quarry, The Get Down, 11/22/63, Designated Survivor, Marvel's Luke Cage, Pure Genius, Bull, Animal Kingdom, Travelers, Dirk Gently's Holistic Detective Agency, Goliath, Mars, StartUp, Chance... y otras tantas series que les tengo echado el ojo. Luego ha habido las series que he abandonado: Girls, por ejemplo, que ya me panté en su 5ª temporada, hace tiempo con The Walking Dead, y Atlanta, Divorce, Preacher, Outcast y alguna más tras su primer episodio (o que considere que "no son para mí"). Que quizá sea pronto, pero el día tiene 24 horas únicamente y, como dice Salvador Martí, "el tiempo es el que es". El regreso de The X-Files (FOX) me dejó frío... como lo hizo hace veinte años.
Respecto a lo visto, he tenido decepciones como la 6ª de Game of Thrones (HBO), que tardó varios episodios en arrancar y de la que me convencieron plenamente apenas dos o tres episodios; el momento del Portón, la Batalla de los Bastardos y el episodio final estuvieron muy bien, pero para mí la serie ha tenido graves problemas de guion en esta entrega. Con Mr. Robot (USA Network) me queda la sensación de ver una buena serie, pero no la repanocha; lo mismo que Stranger Things (Netflix), a la que el excesivo hype acabó devorando; no son malas series ambas, que conste, ni de lejos... pero tampoco la moto que a menudo se ha vendido. Marseille (Netflix) fue un quiero y no puedo, y Narcos (Netflix) dejó sensaciones encontradas en su 2ª temporada, pero esta sí es una buena serie (con sus cosillas, desde luego). Better Call Saul (AMC) estaría en mi selección final, si 2ª temporada fue tan espléndida como la primera, pero ya se sabe, escoger es complicado y a veces se queda fuera algo que justificadamente podría estar dentro. Como la 2ª temporada de El Ministerio del Tiempo (TVE), estupenda también, pero he querido "premiar" otra serie de la casa y que merecía mayor trayectoria: El Caso. Crónica de sucesos.
Ha habido magníficas series históricas, ya desde principios de año con War & Peace (BBC), y más adelante con Victoria (ITV), que adolece de un excesivo toque dowtonabbeyesco, y con la 3ª de Plebs (ITV) he vuelto a pasarlo en grande, tanto como con la 1ª de Upstart Crow (BBC), descacharrante comedia sobre Shakespeare en ocasión del cuarto centenario de su muerte. O la francesa Au Service de la France (ARTE), sobre esos impagables espías en 1960. Netamente "historicista", Los Médici. Señores de Florencia (RAI) es más digna de lo esperado (aunque decae en sus dos últimos episodios), he disfrutado enormementte con The Crown (Netflix) en cada episodio y con aquellas series como The Young Pope (Sky Atlantic/Canal+/HBO) que aunque no son plenamente "históricas" tienen un trasfondo de largo recorrido en cuanto a los intríngulis de un papa que pretende rehacer la Iglesia católica y casi hacerla regresar a tiempos medievales... en todo (empezando por el poder temporal). Y qué decir de Ripper Street (Amazon/BBC), cuyo final se produjo este año y que nos ha dejado a sus seguidores con esa sensación de melancolía y pérdida por alguien querido que nos deja. Como Masters of Sex (Showtime), que ha cerrado la clínica de Masters & Johnson con una excelente 4ª temporada y una mirada a los últimos años sesenta; otra serie que echaré de menos... mucho. Penny Dreadful (Showtime) se despidió con una 3ª temporada que, a grandes rasgos, me pareció muy digna.
Bosch (Amazon) confirmó con su 2ª temporada su buen papel como serie policial, del mismo modo que fue una delicia ver miniseries del género como River (BBC) o Marcella (ITV). Ray Donovan (Showtime) ha sabido ofrecer más (cuando parece que queda poco por decir) en su 4ª temporada, aunque el final fuera demasiado apresurado y facilón. Qué agradabilísima sorpresa han sido miniseries como The Night Of (HBO) y The People v. O.J. Simpson: American Crime Story (FX), ésta, a su manera, también un producto "histórico"; del mismo modo que fue toda una sorpresa la 2ª temporada de The Tunnel (Sky Atlantic/Canal+), quién nos lo iba a decir tras una primera temporada tan fría en 2014. Me convenció Billions (Showtime), sobre fiscales y especuladores bursátiles jugando al gato y al ratón; no tanto la noruega Okkupert (TV2), que no acaba de sacar partido de la idea inicial del novelista Jo Nesbø. Mejor le fue a la miniserie The Night Manager (BBC), que adapta y actualiza la novela homónina de John Le Carré y nos permitió ver a un estupendo Hugh Laurie de traficante de armas sin escrúpulos.... y un no menos buen Tom Hiddleston. O London Spy (BBC), la miniserie sobre espionaje de tempos muy diferentes y que se sostiene en Ben Whishaw. Y en clave Marvel, la 2ª temporada de Daredevil (Netflix), soberbia.
Otra de las grandes sorpresas del año, cuando pensábamos que la fórmula estaba gastada (al menos desde su 2ª entrega), fue American Horror Story con su 6ª temporada, Roanoke (FX), que a mitad de temporada dio una vuelta de tuerca, permítaseme el juego de palabras, "antológica". La 5ª temporada de Veep (HBO) fue toda una sorpresa para mí, muy agradable, y más de una serie que veía un poco por inercia. House of Cards (Netflix, 4ª temporada) ha mostrado, por si no quedaba suficientemente claro de entregas anteriores, que Claire Underwood resulta más interesante que su marido Frank.
En comedias no (tan) cómicas, Better Things (FX) fue una serie que me atrapó paso a paso, mientras que Fleabag (BBC) me conquistó desde el principio. Rodrigo y su troupe me divirtieron en Mozart in the Jungle (Amazon), 2ª y 3ª temporadas, así como me volví a reir mucho con Unbreakable Kimmy Schmidt (Netflix, 2ª temporada). Con la 4ª de Orange is the New Black (Netflix) volví a sentirme cómodo en esa prisión, con tantos cambios, y me emocionó esa mirada final de uno de sus personajes. Ballers (HBO, 2ª temporada) mantiene el tipo de su primera entrega, así como Sex&Drugs&Rock&Roll (FX, 2ª temporada); añado Superstore (ABC). La apuesta mexicana de Netflix, Club de Cuervos, sobre ese equipo ficticio de fútbol en una no menos ciudad ficticia, me entretuvo mucho, pero me temo que su fórmula esté agotada. Y dos series que escapan a simples etiquetas: la maravillosa Transparent (Amazon), con su 3ª temporada, ahondando en el trans y en el parent; y la fascinante The Girlfriend Experience (Starz) y la prostitución de lujo.
También he podido ponerme al día con series de 2015 e incluso antes: Manhattan y la construcción de la bomba atómica (WGN America, 2ª y última temporada), el desembarco aliado en los Dardanelos durante la Primera Guerra Mundial en la interesantísima Deadline Gallipoli (FOXTEL), la política a la danesa en Borgen (DR, 3 temporadas), la danza y el sufrimiento en Flesh and Bone (Starz), la distopía en la 1ª temporada de The Man in the High Castle (Amazon), la 2ª temporada de The Knick (Cinemax) y la catalana Merlí (TV3), poniéndome al día con su 1ª temporada al tiempo que veía la 2ª de este 2016. Quedan también las series "de relleno" y de temporada larga que también me han acompañado este año y que veo con mucho gusto, a veces por inercia: Empire (FOX, 2ª-3ª temporadas), Elementary (NBC, 4ª-5ª temporadas, qué bien sigue funcionando),
Quantico (ABC, 1ª-2ª temporadas), The Big Bang Theory (FOX, 9ª-10ª temporadas), New Girl (FOX, 5ª-6ª temporadas), How to Get Away with Murder (FOX, 2ª-3ª temporadas) o Nashville (NBC, 4ª temporada, regresa en CTM con una 5ª entrega). Y Timeless (NBC), por qué no.
Y quiero reivindicar, sí o sí, Vinyl (HBO), que, a pesar de sus titubeos iniciales (ese macroepisodio de Scorsese de dos horas), merecía continuar.
Así pues, ¿con qué me quedo de este año? Pues con los siguientes 15 títulos, ordenados alfabeticamente:
Así pues, ¿con qué me quedo de este año? Pues con los siguientes 15 títulos, ordenados alfabeticamente:
American Horror Story: Roanoke (FX, 6ª temporada de la antología)
Better Things (FX, 1ª temporada) [el 5º episodio me ganó]
Billions (Showtime, 1ª temporada)
El Caso. Crónica de sucesos (TVE, única temporada; artículo en Serielizados)
Masters of Sex (Showtime, 4ª y última temporada)
Ripper Street (Amazon/BBC, 4ª y 5ª temporadas, final de serie)
[fragmento del score, aunque sea de otra temporada...]
[fragmento del score, aunque sea de otra temporada...]
River (BBC, miniserie) [pedazo de secuencia...]
The People v. O.J. Simpson: American Crime Story (FX, 1ª temporada de la antología)
The Crown (Netflix, 1ª temporada)
The Night Of (HBO, miniserie) [mi opening favorito del año]
The Young Pope (Sky Atlantic/HBO/ Canal+, 1ª temporada)
[otro de mis openings del año; o momentos sorrentinianos como este]
[otro de mis openings del año; o momentos sorrentinianos como este]
Upstart Crow (BBC, 1ª temporada)
Veep (HBO, 5ª temporada)
Vinyl (HBO, única temporada)
War & Peace (BBC, miniserie
¿Y si tuviera que elegir una serie? Pues que sean tres: The Crown, The People v. O.J. Simpson y The Night Of.
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