29 de enero de 2021

28 de enero de 2021

27 de enero de 2021

26 de enero de 2021

Crítica de cine: Fellini de los espíritus, de Anselma Dell’Olio

Crítica publicada previamente en el portal Fantasymundo.

En el inicio de este documental, que se sitúa en la capilla ardiente del ataúd que alberga el cadáver de Federico Fellini, uno de los asistentes comentaba la relevancia de su muerte, prácticamente la de un jefe de estado, y cuán importante fueron las películas de este cineasta; en un momento determinado comenta que en el metro silbó (y silba la “La passerella di Otto e Mezzo”) y que todo el mundo se giró: reconocían el tema de Nino Rota para este filme, uno de los mejores de Fellini, se sumaban incluso. “Cuando la humanidad se siente unida”, terminaba. Hoy en día, es más que probable que alguien silbe esta y otras piezas que Rota compuso para muchas películas de Fellini, y pocas personas las reconozcan; quizá si escuchan el tema de Amarcord les venga a la cabeza el anuncio de unos cruceros

Las películas de Federico Fellini (1920-1993) tampoco suelen emitirse con asiduidad en las cadenas generalistas: quizá la 2 de TVE muy de tanto en tanto o algún canal local casi de tapadillo. No busques en los catálogos de Netflix y HBO España: no tienen ninguna de sus películas. En Amazon Prime Video sí encontrarás joyas como 8 y medio, Los inútiles, La Dolce Vita y Giulietta de los espíritus, que podrás complementar en Filmin (dónde si no), donde encontrarás estas y otras películas del director italiano: La Strada, Las noches de Cabiria, Fellini Satyricon, Roma de Fellini, Boccaccio 70… Tristemente, ninguna de esas plataformas incluye Amarcord en sus catálogos. 


Pero para los que tenemos ya una cierta edad y recordamos ciclos de películas en TVE cuando éramos pequeños, el cine de Fellini forma parte de nuestra educación sentimental, de nuestro bagaje; entonces quizá no comprendiéramos esas películas, pero nos fascinaban: tenían algo, entre la realidad y los sueños, entre el misticismo y lo costumbrista, que nos atrapaba, que nos mantenía enganchados al televisor (y más en aquellos armatostes que “potenciaban” el blanco y negro). Comentaba, y volvemos al documental, ese asistente anónimo al homenaje al cineasta fallecido lo que significaba Fellini: su gran espiritualidad. Y es que Fellini de los espíritus incide, ya en el propio título con un juego de palabras que evoca una de sus grandes películas, en precisamente eso: la espiritualidad de su cine. 

Estrenado con motivo de su nacimiento en 2020, el documental de Anselma Dell’Olio se centra no tanto en lo que sería habitual en el género, la vida y obra de este gran personaje, sino en lo que tiene de “espiritual”, por definirlo de esa manera, su cine. El viaje (le fascinaban al de Rímini las estaciones de tren, pero no le gustaba viajar), la religión, los sueños (quizá ambos sean los temas que más desarrolló en su filmografía y desde diversas aproximaciones, siendo el primero además fuentes de no pocas controversias) y el psicoanálisis son algunos de los ejes sobre los que pivota el filme. 


Una película documental que se construye a partir de fragmentos de sus películas y de extractos de entrevistas al propio Fellini (incluso alguna en España) durante muchos años, a colaboradores y amigos suyos (guionistas, escritores, periodistas, músicos, académicos, críticos de cine, “amigos mágicos”), y a directores que han admirado su obra, como William Friedkin, Terry Gilliam y Damien Chazelle, que serán mucho más reconocidos para el público que esa pléyade de colaboradores y amigos que hablan sobre el director italiano; quizá Nicola Piovani (que compuso la música de las últimas películas de Fellini, una vez desaparecido Nino Rota en 1979) y, sobre todo, Roberto Benigni (que protagonizó su último filme, La voce della luna en 1990) sí sean más conocidos para el espectador no italiano. 

El resultado es una delicia para los amantes del cine de Federico Fellini y, me parece, una estupenda oportunidad para que se aproximen a él quienes lo han catado poco o no lo conocen (atención, estudiantes de cine y televisión: supone parte de vuestro aprendizaje). Un documental que se acompaña de una banda sonora a cargo de Antonio Fresa que evoca la música de Nino Rota (a destacar en un collage de fragmentos de películas al final del mismo) y que nos traslada a ese mundo “mágico”, espiritual, de uno de los directores y guionistas italianos más importantes, si no el más importante y original, de la cinematografía italiana. Y sobre todo un viaje a los recuerdos que sólo sus películas, sus imágenes y personajes, su música, logran desenterrar de nuestra nebulosa memoria.

25 de enero de 2021

Canciones para el nuevo día (3175/2394): "For What It's Worth"

Jaguar Sun - For What It's Worth



Disco: For What It's Worth (2020) - single



22 de enero de 2021

21 de enero de 2021

20 de enero de 2021

Canciones para el nuevo día (3172/2391): "Get Off Of My Cloud"

The Rolling Stones - Get Off My Cloud



Disco: December's Children (And Everybody's) (1965)



19 de enero de 2021

18 de enero de 2021

Canciones para el nuevo día (3170/2389): "Eres para mí"

Julieta Venegas ft. Anita Tijoux - Eres para mí


Disco: Limón y sal (2006)



15 de enero de 2021

Canciones para el nuevo día (3169/2388): "Sueños"

Diego Torres ft. Julieta Venegas - Sueños


Disco: MTV Unplugged (2004)



14 de enero de 2021

13 de enero de 2021

12 de enero de 2021

Canciones para el nuevo día (3166/2385): "Dreams"

The Cranberries - Dreams



Disco: Everybody Else is Doing It, So Why Can't We? (1993)



8 de enero de 2021

7 de enero de 2021

6 de enero de 2021

5 de enero de 2021

Reseña de Dante, de Alessandro Barbero

En 2021 se conmemorará el séptimo centenario de la muerte de Dante Alighieri (Florencia, 1265 – Rávena, 1321), figura cumbre de las letras italianas (de hecho, se considera que con él comienza a fijarse el idioma italiano como tal) y autor del poema la Comedia (c. 1305-1321) –el adjetivo “divina” fue añadido por Boccaccio, no por el propio Dante, y como Divina Comedia se tituló por primera vez en la edición impresa en Venecia en 1555. En la traducción de Micó en Acantilado se titula simplemente como Comedia. 5-1321)–, obra maestra de la literatura en esta lengua. Es de esperar, pues, que haya multitud de actos, simposios y publicaciones a lo largo de los próximos dos años, especialmente en Italia. En el mercado español, además de la nueva y muy reciente traducción de José María Micó en Acantilado (2018), que se une a otras tantas, llegaron también en el último año dos biografías: Dante. La novela de su vida de Marco Santagata (Cátedra, 2018; edición original en italiano, 2012) y Dante de Enrico Malato (Edhasa, 2019; edición original en italiano, 1999).  Y en 2020, en pleno Confinamiento, llegó este Dante de Alessandro Barbero (Laterza) a las liberías italianas y que a lo largo de 2021 se presentará, traducido por Acantilado, a las españolas.

4 de enero de 2021

2 de enero de 2021

Crítica de cine: El arte de volver, de Pedro Collantes

Crítica publicada previamente en el portal Fantasymundo.

Noemí (Macarena García) regresa a Madrid tras varios años de residencia en Estados Unidos. Es actriz, cruzó el charco y confió en encontrar papeles, pero, tras muchos castings, apenas ha hecho poco más que algunos anuncios, que además le provocan vergüenza propia: el hecho de ser reconocida por otra aspirante a un papel en una audición, que le pregunta si es la chica que aparece en el anuncio de la revista que está leyendo, la perturba lo suficiente como para finalmente marcharse. En realidad, el problema de Noemí es que, al volver a casa, se siente desubicada, perdida, personal y profesionalmente. Y es que la sensación de estar perdidos, de un modo u otro y en algún momento de nuestra vida, la tenemos todos; y si además regresas y te das cuenta que cuando te reúnes con familiares y amigos hay una barrera invisible, es que algo falla: el mundo, tu alrededor… tú. 

1 de enero de 2021

Crítica de cine: El padre, de Florian Zeller

Crítica publicada previamente en el portal Fantasymundo.

No es fácil llevar a la gran pantalla un texto con origen teatral. Los lenguajes, medios y estilos son diferentes, y no es suficiente con ponerse a declamar: de hecho, esto último chirría a las primeras de cambio. Un escenario, con su público, impone y al mismo tiempo reconforta, y por ello lo que a veces parece funcionar sobre las tablas deviene frío y “sobreactuado” en un set de rodaje. Roman Polanski sabe cómo hacerlo, ya sea llevando Un dios salvaje de Yasmina Reza al cine en 2011, o “creando” una película como La venus de las pieles (2013) a partir de un texto del dramaturgo David Ives, que a su vez se inspiraba en una novela decimonónica de Leopold von Sacher-Masoch; ya fueran cuatro o solamente dos actores, como sucedía respectivamente, el duelo interpretativo permitía lucirse a los actores y que los “espectadores” (¿de cine o de leatro?) nos lo pasáramos en grande. Más complicado es cuando el dramaturgo/director de cine/director de teatro es la misma persona y lleva un texto propio del escenario a la gran pantalla y la cosa no le funciona del todo bien: le ha pasado hace nada a Cesc Gay (adoro a Cesc Gay), que presentó su versión teatral de Sentimental (2020), basada en su obra Los vecinos de arriba, y donde uno se queda con la sensación de que se lo habría pasado mucho mejor con el original teatral, mientras que con la adaptación cinematográfica parece que todo está demasiado “teatralizado”; en cambio, el paso de un ámbito a otro le funcionó muy bien a Gay con V.O.S. (2009), por ejemplo, donde ese lenguaje escénico se incrusta con más naturalidad. [Nota: nadie como Cesc Gay crea estupendos diálogos y conversaciones en el cine español actual, y se nota que se siente cómodo con el lenguaje teatral; Sentimental, que quede claro, no es una mala película, ni de lejos: pero “suena” demasiado a teatro.]